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16 de agosto de 2013

Isla de Pascua, vía de salida para Edward Snowden



por Eduardo Labarca

14 de julio de 2013

Edward Snowden es objeto de feroz persecución por haber revelado el espionaje que Estados Unidos ejerce a escala planetaria, incluso en Chile, y que viola el derecho internacional y la privacidad de todos nosotros, usuarios de la Internet. Snowden permanece inmovilizado en Moscú sin posibilidades de viajar a Venezuela, Bolivia y Nicaragua, que le han ofrecido asilo, debido a que los gobiernos europeos, que mostraron su obsecuencia hacia Estados Unidos con la afrenta que hicieron al presidente Evo Morales, no le permiten sobrevolar sus territorios. Pero existe otra posible vía de salida: la del océano Pacífico, en un vuelo que podría partir desde un aeropuerto del extremo oriental de Rusia en la parte asiática del país, con eventuales escalas en China y algún Estado insular de Polinesia. Debido a la distancia se necesitaría una escala cerca de Sudamérica y allí está el aeropuerto de Mataveri en la Isla de Pascua, territorio chileno, a 2.600 kilómetro de nuestras costas, de donde Snowden podría volar finalmente a su asilo en nuestro continente latinoamericano.
Al respecto existe un precedente, aunque en dirección inversa. En 1968 el presidente Eduardo Frei Montalva permitió la salida de Chile de Pombo, Urbano y Benigno, los tres sobrevivientes de la guerrilla del Che que habían entrado al país a pie desde Bolivia a través de la frontera. Para evitar que el avión fuera obligado a aterrizar si sobrevolaba algún país latinoamericano donde imperaban las dictaduras militares y la CIA había desplegados a sus agentes con la misión de capturarlos, se decidió que los guerrilleros volaran a través del Pacífico sobre aguas internacionales, lo que hicieron en un avión Lan acompañados por el presidente del Senado Salvador Allende en dirección a Pascua. De allí siguieron a Tahití, posesión francesa, donde fueron acogidos por disposición del presidente Charles de Gaulle y desde ese lugar continuaron hasta París y de ahí a Praga, regresando sanos y salvos a Cuba desde esa capital europea.
Tres hombres de honor con diferentes posiciones políticas demostraron su condición de estadistas al garantizar la salida de los guerrilleros en retirada: el presidente Frei, democratacristiano sin afinidad alguna con el movimiento guerrillero; el general De Gaulle, militar conservador;  Allende, demócrata de izquierda amigo del Che.
Hoy, el presidente de Chile Sebastián Piñera, que participa activamente en las organizaciones multilaterales de la región, tiene la posibilidad de actuar como estadista y ser digno de sus antecesores Frei y Allende y de la tradición chilena y latinoamericana del asilo al perseguido. Facilitar la escala en Isla de Pascua del avión de Snowden sería un acto digno que honraría  a Chile y por el cual Piñera pasaría a la historia.